Fake News: que no te tomen el pelo

Las Fake News o noticias falsas se difunden rápidamente a través de las redes sociales convirtiéndose en virales. Y sus mayores “consumidores” son los jóvenes, quienes dan por veraz casi todo lo que ven publicado en Instagram, YouTube, Facebook, WhatsApp…

De hecho, un estudio realizado por académicos del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) ha demostrado que las noticias falsas se difunden más rápidamente en la red social Twitter que las noticias reales, y por un margen sustancial. Y, ojo al dato, pues el estudio consigue cuantificar este fenómeno: las historias de noticias falsas tienen un 70% más de probabilidades de ser retuiteadas que las historias reales. 

Aunque no hay estudios que se extrapolen a otras plataformas de redes sociales, si es posible que en ellas ocurra lo mismo. Ante este panorama, con bulos aparentemente reales pero que se difunden con voluntad deliberada de engañar, ¿qué podemos hacer para desarrollar el espíritu crítico y reflexionar sobre los contenidos que leemos y compartimos para evitar su difusión? Hay que aprender a informarse:

  • Lee todo el artículo, no sólo el título.
  • Comprueba la fecha de publicación -puede que no sea actual- y si hace referencia a un suceso que ocurrió en un día determinado, ya que las noticias falsas suelen ser atemporales y por eso circulan durante años por internet.
  • Fíjate si está firmada -las noticias falsas suelen ser anónimas-.
  • Las noticias falsas no suelen tener fuentes, es decir, el autor de esa información no indica con quién o con qué institución ha hablado ni que documentos ha investigado para corroborar lo escrito. Incluso, a veces, se inventan nombres, por lo que tendrás consultarlo en internet.
  • En algunos casos, invitan al lector a difundir el bulo, al contrario que cualquier noticia veraz que simplemente te informa de algo.
  • Sus titulares son exageradamente impactantes porque intentar emocionar.  Para ello se ayudan de mayúsculas y signos de exclamación.
  • La redacción de las noticias verdaderas suele estar muy revisada, mientras que las falsas tienen errores ortográficos y gramaticales o, incluso, han sido traducidas por herramientas automáticas.
  • Las noticias verdaderas se publican en varios medios de comunicación, mientras que las falsas en muy pocos. Desconfía si no aparecen en los más conocidos.
  • Fíjate también en las fotos, pues suelen estar retocadas o pertenecen a stocks. En otras ocasiones emplean fotos ya publicadas en fechas anteriores.

Tras comprobar todos estos puntos, ya solo queda una cosa: Piensa antes de retuitear, compartir o recomendar publicaciones o fotos.


Las Fake News o noticias falsas cada día se difunden más rápidamente a través de las redes sociales convirtiéndose en virales. Y los mayores consumidores de ellas son los adolescentes, quienes dan por veraz todo aquello que ven publicado en Instagram, YouTube, Facebook… ¿Cómo conseguir, entonces, que sean críticos y reflexionen sobre los contenidos que leen y comparten para evitar su difusión? Para ello hemos diseñado una sesión eminentemente dinámica, donde los escolares de 3º y 4º de ESO aprenderán que no todo lo que hay en Internet es cierto, despertaremos el pensamiento crítico en la red y la capacidad para contrastar informaciones y les ayudaremos a convertirse en sus propios “fast check” o filtros para detectar los bulos.